El ministro de Defensa de Irán, el general de brigada Aziz Nasirzade, ha asegurado que su país responderá con fuerza ante cualquier ataque contra la República Islámica. 

“Si se produce un ataque o se nos impone una guerra, apuntaremos a sus bases, y en este sentido, no haremos ninguna consideración ni limitación”, declaró Nasirzade el domingo, en reacción a las recientes amenazas del secretario de Defensa de Estados Unidos, Sean Parnell. 

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El funcionario iraní lamentó la postura contradictoria de Washington, que por un lado afirma estar dispuesto a negociar, pero por otro sigue lanzando advertencias militares contra la nación persa. “Con la República Islámica no se debe hablar en lenguaje de amenaza”, enfatizó. 

Además, un alto comandante del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) ratificó la firme postura de Teherán en la defensa de sus derechos e intereses, asegurando que Irán no negociará sobre sus capacidades misilísticas. 

Nasirzade destacó que su país nunca ha iniciado un conflicto bélico, pero si es atacado, responderá sin vacilación. Advirtió que, si la agresión proviene de EE.UU. o de Israel, Irán golpeará sus intereses y fuerzas donde sea necesario. 

En este contexto, el ministro anunció el exitoso lanzamiento de una nueva prueba de misil balístico, capaz de alcanzar objetivos con gran precisión sin depender del sistema de navegación GPS. 

Por último, respecto a la situación en Yemen, Nasirzade subrayó que el país árabe es soberano y toma sus propias decisiones, negando cualquier implicación iraní en el reciente derribo de un avión estadounidense en el mar Rojo. 

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